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El pretencioso relanzamiento del PAN

  • Foto del escritor: Pablo Nagano
    Pablo Nagano
  • 27 oct
  • 9 Min. de lectura
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Apunte diagnóstico

●       Los ciudadanos de 18 a 34 años son el segmento más grande del padrón (casi el 36% en 2024), lo que les da un peso electoral decisivo, además de que actualmente representan el segmento más crítico del electorado.

●       Los jóvenes están preocupados por la corrupción, la inseguridad, la violencia, el empleo, la educación, la desigualdad y el cambio climático. Las agendas juveniles de los partidos políticos no los representan al cien por ciento.

●       En 2018, Morena capturó gran parte del voto joven, y el PAN quedó significativamente detrás. En ese escenario la estrategia del PAN rumbo a 2027 previsiblemente busca sumar a más ciudadanos, fortalecer la unidad interna y relanzar su imagen, incluso con un amago de ruptura de alianzas con el PRI y lo que queda del PRD para "lavarse la cara".

●       Actualmente el PAN ha dejado ver que están enfocados en el desarrollo de habilidades de sus cuadros políticos, el servicio social y propuestas concretas en materia de vivienda digna, pensiones, y una Ley General de Juventud.

 

El relanzamiento del Partido Acción Nacional, ofreciendo a la ciudadanía apertura total y el distanciamiento de alianzas partidistas (principalmente con el PRI) para las elecciones intermedias de 2027, claramente es una estrategia diseñada para reposicionar al partido como la principal opción opositora tras el revés de 2024, sobre todo con el objetivo de reagrupar a todas las facciones de derecha y atraer a sus filas grupos de jóvenes inconformes, pero conservadores.

 

Búsqueda de impacto potencial en la ciudadanía joven de entre 18 y 34 años

El PAN está realizando un guiño directo y calculado a la juventud, reconociendo su peso electoral y la necesidad de renovar su base.

El Mensaje de "Apertura Total"  busca generar identificación y Sentido de Pertenencia en el electorado. La eliminación de trámites burocráticos para la afiliación ("le das click, y ya") apela a la inmediatez y el pragmatismo de la generación digital. Facilita la participación sin pedir un compromiso ideológico inmediato, actuando como un "partido startup" más accesible. Con lo que pretende remodelarse y transitar de un partido de cuadros muy cerrado a un partido catch all, con lo cual abre las puertas a toda la sociedad y termina con el rol de club que impera en el PAN.

La Promesa de Elecciones Primarias Abiertas busca otorgar a la ciudadanía que decida afiliarse la PAN el empoderamiento y la oportunidad de participar como candidatos a cargos de representación popular, ofrece la posibilidad de que ciudadanos sin militancia se conviertan en candidatos y que la base decida a través de elecciones primarias, encuestas y voto directo, lo que hace eco a os clamores juveniles de meritocracia y rechazo a las cúpulas. Promete romper el viejo sistema de élites que ha frustrado a los jóvenes en todos los partidos (incluyendo el PAN histórico).

La puesta en escena y el audiovisual que usó el dirigente nacional del PAN en su evento resultan relevantes, pero corren el riesgo de banalización. 

Dar voz a las juventudes panistas y usar un montaje moderno (IA, alusiones a Harry Potter y los dementores de Morena) es un intento de hablar su lenguaje. El uso de la IA y la narrativa de fantasía oscura busca viralidad y simplificación del mensaje opositor, aunque el riesgo es que el mensaje se perciba como poco serio o frívolo si no va acompañado de propuestas sustanciales.

La eventual ruptura con el PRI pretende refrescar la imagen del PAN histórico, argumentando que la alianza con el PRI fue un lastre que, para muchos jóvenes, invalidó la narrativa de cambio y los asoció al viejo régimen y a la corrupción. La ruptura permitirá al PAN presentarse como una opción limpia y renovada, capaz de capitalizar el voto de jóvenes desencantados con Morena pero reacios a votar por una coalición percibida como "lo mismo de siempre".

La crítica a la "aplanadora morenista" obliga a la movilización opositora.

Al declarar que están en la "última llamada para la oposición", apelan al sentido de urgencia y la necesidad de "salvar a México" de las "fuerzas oscuras" (Morena). Este discurso busca movilizar a jóvenes que, si bien son críticos con el PAN, están aún más preocupados por la concentración de poder y la deriva del partido gobernante.

En resumen, el PAN busca atraer al joven crítico, pragmático, apolítico o desencantado que valora la transparencia, la meritocracia y la acción rápida, ofreciéndole una vía exprés para la participación y un vehículo opositor limpio y moderno.

Trazo del objetivo estratégico del PAN de cara a 2027

El objetivo principal del Partido Acción Nacional con este relanzamiento es doble:

1. Reconstrucción de la base partidista y legitimidad interna

●        Objetivo Táctico: Fortalecer la estructura interna y reactivar a la militancia desmotivada. ●        Mecanismo: La "apertura total" y las primarias no solo buscan nuevos cuadros, sino que son un mecanismo para legitimar la nueva dirigencia de Jorge Romero. Al forzar a los líderes internos a volverse "competitivos en su tierra" y trabajar para ganarse a la gente, se busca limpiar los vicios de la cúpula criticada por sus propios militantes. El mensaje a las bases es: "Trabajen o serán reemplazados por un ciudadano competitivo."

2. Posicionamiento como el único eje opositor sólido

●        Objetivo central: Capitalizar el descontento de la clase media y el voto joven urbano que rechaza a Morena, pero que no votaría por una alianza con el PRI. ●        Mecanismo para el posicionamiento:

o    Contraste Estratégico: El PAN busca convertirse en el "principal vehículo de participación ciudadana" para los votantes huérfanos de la reciente elección (el voto no-Morena) y aquellos decepcionados por la falta de resultados del oficialismo, interpelando su discurso ("¿Todavía se atreven hoy a hablar de transformación, de honestidad, de austeridad?").

o    Al romper con el PRI, el PAN aspira a recuperar su identidad tradicional como partido de doctrina (familia, libertad, patria) y atraer al segmento ideológico más conservador que se había diluido en la alianza. Esto le permitirá competir directamente por el voto de centro-derecha, derecha y centro que se sentía incómodo con la coalición Fuerza y Corazón por México.

o    Al priorizar la juventud ("le pasamos la antorcha a la siguiente generación") pretende renovar el Liderazgo y la abrir la posibilidad de registrar a candidatos externos, el PAN intenta encontrar nuevos liderazgos carismáticos que puedan hacer frente a la hegemonía de Morena, sin depender de sus viejos cuadros desgastados por el fracaso electoral de 2024.

 

En ese entorno, el rol de Ricardo Anaya (este análisis está basado exclusivamente en la información periodística disponible), busca fortalecer el papel que le asignaron desde el CEN del PAN, como Coordinador de la Resistencia Parlamentaria y con ello ser la figura de autoridad y el orador principal del PAN en el Senado, aprovechando que su cargo como Coordinador de la Bancada de Acción Nacional en el Senado de la República, un le otorga máxima visibilidad mediáticas y dentro del poder legislativo. Su función es darle batalla al oficialismo y ser una voz que le aumente el volumen a Acción Nacional. Esto lo convierte en el líder de la oposición en la Cámara Alta, el espacio más crítico para debatir e intentar frenar las reformas constitucionales de MORENA.

Anaya ha venido construyendo su imagen como Defensor de la Democracia. Sus intervenciones giran en torno a los abusos de poder y la denuncia de leyes que atentan contra la privacidad de los ciudadanos (geolocalización y espionaje).

Anaya no solo es un operador en el Senado, sino un aliado crucial en el proyecto de Romero para renovar el partido.

●        Anaya respaldó a Jorge Romero para que asumiera la dirigencia del PAN. Ambos han compartido plataforma en reuniones plenarias (agosto de 2025), proyectando una imagen de unidad en la cúpula que es vital tras las divisiones internas post-2024.

●        Anaya ha coincidido con Romero al reconocer que la solución a la crisis que atraviesa el PAN es urgente, afirmando que "si en este momento el PAN, no se reforma a fondo, no se renueva, podrían ser los últimos días del PAN. Es ahora o nunca". Este diagnóstico respalda la estrategia de "apertura total" y relanzamiento de Romero.

●        El propio Romero afirmó que Anaya será la "brújula" del partido, mientras Anaya aseguró que el PAN tiene "Faro y Brújula bastante claros". Esto indica una coordinación ideológica y de discurso entre la dirigencia (Romero) y el liderazgo legislativo (Anaya).

El rol de Ricardo Anaya es ser el Mazo de la Oposición en el plano legislativo, complementando la estrategia de Apertura Ciudadana de Jorge Romero.

●        Mientras Romero se enfoca en la base territorial, la afiliación joven y el cambio de imagen (rompiendo con el PRI y atrayendo ciudadanos); Anaya se encarga de la batalla ideológica y el contraste político de alto nivel desde el Senado, fijando la agenda mediática y la narrativa opositora sobre temas de seguridad, endeudamiento y autoritarismo, lo cual es vital para convencer a la clase media y a los jóvenes que buscan un contrapeso efectivo al gobierno. Su posición de liderazgo en el Senado, el órgano con mayor capacidad para debatir las grandes reformas, lo coloca como una de las figuras más visibles e indispensables en el proceso de relanzamiento del PAN rumbo a 2027.

Choque interno de trenes

Por otro lado y en tiempo diferenciado, el escenario de un choque entre Jorge Romero y Ricardo Anaya es previsible e incluso estructural a futuro, dada la ambición presidencial que ambos perfiles proyectan y la historia reciente del PAN.

Ambos son figuras jóvenes que han ocupado la dirigencia o la coordinación parlamentaria del PAN. El PAN tiene una larga historia de divisiones internas en sus procesos de selección presidencial, lo que hace que cualquier mancuerna de alto nivel sea inherentemente inestable a largo plazo.

Romero controla el aparato del partido (el CEN, la militancia, la estructura), capitalizando la "apertura total". Anaya, en cambio, controla la voz de la oposición de alto nivel en el Senado y el debate de las grandes reformas. Para 2030, el candidato deberá ser una combinación de ambos: un operador político fuerte con alto reconocimiento y un discurso nacional efectivo. La disputa se centrará en quién cederá el poder a quién. Si la "apertura" de Romero no arroja nuevos líderes creíbles, Anaya será la figura natural para 2030, lo que creará tensión con la dirigencia.

Aunado a lo anterior, ahora se suma otra dupla de actores en el escenario interno del relanzamiento del PAN, uno es de casa, Felipe Calderón; el otro externo pero con más vocación ideológica y pragmática de derecha liberal que todos los panistas juntos, Ricardo Salinas Pliego.

El escenario prospectivo de la derecha opositora.

Los previsibles aspirantes a la candidatura para la presidencia de la República en oposición a morena desde la derecha ahora son tres: Ricardo Salinas pliego quien aventaja mucho en discurso exposición pública y narrativa a los demás aspirantes cómo lo son Ricardo Anaya, quien a pesar de ser un excelente tribuno carece el apoyo estructural del partido y prácticamente ha estado sometido al dictado de la cúpula partidista defendiendo la posición del PAN en el Senado de la República, lo cual le da exposición mediática, pero no le da solidez para ganar una elección interna y mucho menos una elección constitucional, ya que está acotado por Jorge Romero quien lo va a utilizar, pero no lo deja para dejará crecer.

Y finalmente se encuentra también Eduardo Verástegui a quien dentro del PAN menospreciaron todos, pero cuya habilidad y manejo de relaciones públicas logró posicionarlo cerca del equipo de Donald Trump quién lo ha convertido en uno de los alfiles más importantes para el relanzamiento de la derecha a nivel continental.

La disputa por la candidatura a la presidencia al interior del PAN con estas tres figuras sumadas a la declaración velada del expresidente Felipe Calderón, más que favorecer el relanzamiento del partido emblemático de la derecha mexicana, lo puede balcanizar y  amenaza con fracturar al partido al interior.

en ese contexto cobra especial relevancia la opinión de Felipe Calderón de que hay que revisar la política de alianzas del PAN sobre todo con el PRI y con MC, partido en el cual él mismo ya tiene un pie dentro, puesto que su sobrino es el secretario general de la cúpula Nacional de Movimiento Ciudadano, ello sin dejar de lado el fortalecimiento de la identidad político electoral del PAN, de cara a las próximas elecciones, lo cual es una contradicción.

Por lo anterior, se puede inferir el empantanamiento del PAN en la definición de este galimatías, lo que da ventaja a Ricardo Salinas Pliego, quien ya cuenta con la narrativa y cuyo alineamiento con los intereses de la Derecha continental no le sería complicado, amén de contar con los recursos suficientes para construir su propia estructura electoral, máxime que la situación de confronta con el actual gobierno lo obligará a ello, pues, luego de la decisión de la Suprema Corte en su sesión de hoy, determinó que los ministros y magistrados no pueden ser apartados de un juicio por asuntos “accesorios”, como recusaciones o trámites que no inciden en el fondo del caso. Esto impactará todos los casos en que se interpongan recursos con ese fin, incluidos los litigios fiscales de Grupo Elektra, donde ya se han rechazado impedimentos bajo ese argumento.[1]

Ahora bien, ¿podrá Ricardo Salinas hacerse con la candidatura a la Presidencia de la República dentro del PAN? podemos intentar algunas hipótesis:

1.- Ricardo Salinas, a diferencia de Anaya y Verástegui cuenta con los recursos suficientes (de todo tipo)  para forzar a las bases del PAN a impulsarlo, ya que es abiertamente liberal de derecha, empresario, millonario y tiene a su disposición una red mediática enorme, lo que posibilite su acceso a la candidatura.

2.- Compara con Felipe Calderón, Salinas no ha sufrido el desgaste del ejercicio del poder y dentro del espectro ideológico de derecha cuenta con arrastre y respaldo ciudadano en todas las organizaciones de derecha y de centro, lo cual lo convierte en un candidato apetecible para los intereses de los diversos grupos y organizaciones conservadores, pero alejadas del dogmatismo, nicho que pretende conquistar la actual dirigencia nacional del PAN (conservadores dogmáticos), es decir, Salinas tiene un espectro de influencia más amplio que el del PAN y sus competidores, por lo que no será fácil para él conquistar la candidatura, la pregunta no es si puede, sino si quiere ser candidato del PAN o bien de un frente amplio de derecha, como lo plantea Felipe Calderón.

 


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